MILODÓN
Para Cristian Donoso, de ocho años
que ama esta zoología poética y real.
La cueva quedó cubierta con una capa de cenizas,
entonces los animales abandonaron su refugio.
Replegado. Enterrado en el suelo,
acordeón de pelos rojos permaneció por siglos.
Conoces deslumbrada un mundo extraño.
Los libros del colegio son un túnel
que te lleva al principio de la vida:
Ciudad de los Césares
Puerto Consuelo, Natales,
Cordillera de los Baguales
Puerto Bories.
Leyenda y realidad son una misma cosa.
La cueva es una plataforma enorme
donde conviven felinos y bandadas de choroyes.
La Cordillera Balmaceda es el inaccesible
roquerío de las águilas.
En la región de bosques
Los milodones buscan su alimento.
Desdentados de minúscula cabeza,
atrapan con las garras de sus manos
ramas y hojas.
Estudio, leo
sin comprender el abismo
que son quince mil años en la piel
de un animal extinto.
Entre los árboles calcinados
se conservó la piel del herbívoro gigante.
1896. Descubren el insólito objeto
que sobresalía del suelo polvoriento:
lo trasladan a un museo de Inglaterra.
Estalactitas milenarias
siguen llorando en las paredes de la bóveda.
Última Esperanza, 1976
Marina Latorre Uribe, del libro VENTISQUERO, Ediciones Bolt / 1981
5 comentarios:
hermoso recorrido geo-biológico
es como si a través de la palabra nos llevaras hasta allí
un abrazo grande
gracias por las revistas
tenuna semana preciosa Marina
Marina...saqué el Milodón y los enlaces que me pediste. Disculpa mi excesivo entusiasmo. Se me olvida que mi prisma para ver las cosas es singular, o mejor dicho, poco común.
Si deseas saque el enlace manchado no hay problema: sólo llámame y dilo.
Un beso.
Magnífico poema.
Magnifica escritora.
Un saludo a su trabajo.
Espero me permita publicar este poema en un diario mural de la Universidad Los leones, espacio que generamos las estudiantes de pedagogía.
Un poema que te transporta a un sin tiempo y te deja desnudo, calcinado acompañando te en este viaje poético y temporal.
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